jueves, 25 de diciembre de 2008

La Natividad de mi Palabra

De hoy no podía pasar, era hoy o nunca, siempre pensando que hay tiempo, pero de hoy no podía pasar. Por fin he decidido ponerme a escribir, empezar ya lo que debería haber empezado hace tiempo, porque ¿qué es la vida sin literatura? ¿y sin música? ¿y sin alguien a quien amar? ¿y sin un buen trago? ¿y sin todas esas cosas que hacen a uno amarla?... cualesquiera que sean esas cosas. Afortunadamente, a mí me gustan muchas de esas cosas que hacen sobrevivir en esta a veces tortura y a veces éxtasis que es la vida (por desgracia, más de lo primero), si no, no sé como lo soportaría... Y una de esas cosas es la literatura..., así que ya es hora de producirla yo y no esperar que otros la produzcan por mí para mi deleite y disfrute. Ya sé, ya sé que mi otra pasión es la música, pero para crear en ese campo me falta oído, mejor dicho, me falta todo, soy incapaz de distinguir nada, sólo puedo llegar a apreciar los sentimientos que me produce. Sin embargo, en el campo de las letras puedo crear mis propias historias con ridícula dignidad, decir lo que pienso o siento sin tener que esperar a que otra persona lo diga por mí para sentirme totalmente identificado con su sentimiento/pensamiento y decirme “joder, es justo lo que quería decir yo” o “ha dado en el clavo con lo que siento”. Llegó la hora de que sea yo el que tome las riendas de mi YO, de mi alma, y no dejarla en manos de poetas, dramaturgos y novelistas, y demás monstruos de la palabra. Es el tiempo de que juegue con las palabras hasta encontrar exactamente lo que tengo que decir, aunque sólo lo escuche yo, aunque el único deleitado y disfrutante sea yo. Ese día ha llegado y es... ¡hoy!

martes, 16 de diciembre de 2008

La dictadura elitista de "Menteserrín"

Si Franco levantara la cabeza, vería que su dictadura era una real mierda represivamente hablando al lado de la que está imponiendo (y parece que yendo a más) el señor alcalde de Sevilla, más conocido como su Excelencia "Menteserrín¨. Basándose en la famosa "ley del botellón", no sólo está aprovechando para acabar con esta forma de beber en la vía pública, sino con los bares de ciertas zonas de la ciudad. Desde hace un tiempo a esta parte, los que solemos ir a estas zonas de ocio (dícese la Alfalfa o la Alameda) vemos como amplios dispositivos de policía local invaden estas zonas como intimidando a las personas que deciden pasar algunos de sus ratos de esparcimiento. Hubo un día que este que suscribe esta opinión, se encontró a la salida del "Berlín" a un gran grupo de fuerzas policiales municipales y ante lo que vio le preguntó qué ocurría y le contestaron que nada, que estaban allí para cuidar de la calle, eso sí, con miradas desafiantes a todo el que por allí pasa (y eso fue sobre las 12 y media de la noche).
Muchos conocemos lo que sucede en la Alameda a partir de las 12 de la noche de cualquier día del fin de semana, momento en el cual, se acabó beber en la calle y todos a apelotonarse en los diferentes bares de la zona, y esto es controlado por decenas de efectivos de la policía, cómo si los que estuviéramos allí fuésemos delincuentes, cuando en otras zonas de la ciudad hay carreras de coches tuneados con total impunidad o botellonas masivas (avenida Carrero Blanco, donde murió un joven atropellado por un coche hace unas semanas) sin ser vigiladas ni obligadas a desalojar. ¿Esto quiere decir que la "ley del botellón" es sólo para algunas zonas? ¿Cuál, aquellas zonas que el señor alcalde quiere transformar en centros residenciales de alto standing? Entiendo que hay gente que querrá descansar y el ruido les molesta, pero quién se va a vivir a estas zonas ya sabe que allí se desarrolla parte del ocio sevillano desde hace años, mientras sin embargo los que viven en Luis Montoto enfrente de la discoteca "Abril" tienen que soportar las multitudinarias colas para entrar en dichas discotecas y no tienen derecho al descanso.
A esta tarea represiva del señor "Menteserrín", se le ha añadido el rector de la Universidad de Sevilla, Joaquín Luque Rodríguez. A este señor, en una demostración de libertad, se le ha ocurrido la idea de cerrar a cal y canto el rectorado de la Hispalense, sitio público (por cierto), debido a que algunos alumnos de la citada universidad se manifiesta allí en contra del famoso "Plan Bolonia". Ya ni los estudiantes, futuro de este país, pueden expresar sus opiniones. Pero no sólo expresarlas, cualquier persona que quiera visitar tan digno monumento o visitar la biblioteca del rectorado (abierta para préstamos de libros a todo ciudadano) porque a este señor le ha dado la real gana de cerrarlo, para su uso y disfrute. Ya mismo nos van a volver a sacar aquello de dos personas no podrán reunirse ni formar asociación...
Ante esto me viene a la memoria una copla de Francisco Moreno Galván, letrista del gran cantaor José Menese:

"Soy más firme que las cuatro
columnas de la "Alamea",
los Hércules, los leones,
y el "jierro" que las rodea".

PD: este artículo se me ocurrió escribirlo cuando una amiga alemana me comentó un día en la Alameda: "joder, esto cada vez se parece más a Alemania, no se puede hacer nada en la calle".

jueves, 4 de diciembre de 2008

Era un 4 de diciembre...

"Era un 4 de diciembre cuando tomamos la calle...", así comenzaba un pasodoble de carnaval de Antonio Martínez Ares, hace justo diez años, cuando ganó el primer premio de comparsas del concurso del carnaval de Cádiz con sus inolvidables Los Piratas. Entonces, Martínez Ares quería rendir homenaje, este es el mío, a todos aquellos que veinte años antes (es decir en 1978) se habían manifestado por la autonomía andaluza en todas las provincias de la región, con la lamentable muerte de uno de aquellos manifestantes en Málaga, a manos de unos fascistas. Hoy, treinta años después, los que hemos heredado esta autonomía "histórica" (que es el calificativo que se consiguió con aquellas manifestaciones, a pesar de la contrariedad del gobierno de entoces) no creo que hayamos hecho mucho por defender aquella idea por la cual se manifestaron nuestros abuelos, padres, hermanos, tíos, primos..., ellos pusieron la primera piedra de lo que algún día debemos ser (ya lo dice el himno, "volver a ser lo que fuimos"), faros de civilización de Occidente, como bien describen Tito Livio, Estrabón, Platón, Isaías... y muchos otros en la Antigüedad de nuestra historia, cuando nuestros antepasados los tartesos tenían un contacto cultural y comercial al mismo nivel con los griegos desde la cultura micénica (ojo!, esto no es un alegato separatista, me parece absurdo entrar en nacionalismos románticos trasnochados y políticos, sólo es una convicción de un pueblo diferente al resto de la población de la Tierra, con un pasado igual de rico -o más- que muchos de los que presumen de esos nacionalismos, ya sean separatistas o unitarios).


PD: para aquellos que les interese la letra completa del pasodoble o les guste el carnaval aquí va:


Era un 4 de diciembre,
cuando tomamos la calle.
Era un 4 de diciembre,
cuando dijimos que verde y blanca era nuestra sangre.
Andaluces levantaos,
desde el trigo hasta la mar,
un 4 de diciembre luchamos por nuestra gente, España y la humanidad.
Días de guerra, de fascistas en la acera, rezando a su dictador,
tarde de espanto, Málaga entera llorando, mataron a Caparrós.
Y las cadenas,
cayeron nuestras cadenas
y bailaron las estrellas, suspiraron los abuelos, no había ya en el mundo entero
batallón que nos pudiera.
Y las cadenas,
y el sudor de nuestra frente, “to” “pa” los terratenientes “pa” que hicieran la faena.
Rojos contra la pared,
Blas Infante por los muros,
¡No al 143!
¡Sí al 151!
¿Cómo se puede olvidar
20 años de libertad?
Libre, libre para siempre
¡Qué bonita navidad,
aquel 4 de diciembre!

lunes, 1 de diciembre de 2008

"El día que la luna salió tarde"

Recientemente, y sobre todo después de ver el concierto de Lori Meyers en el Sonorama (a los que espero ver al final de mes en el Territorios), se me ha ocurrido la paranoica teoría de que la música alternativa española tiene su capital en Granada. ¿Cómo habrá pensado mi desquiciado cerebro en una tontería tal? ¿Cómo es posible que el arte musical contemporáneo en el pop no pase por Madrid y Barcelona, esas ciudades tan cosmopolitas y abiertas al mundo? Bueno, son las ideas de una noche festivalera con algo de alcohol y un kebab en el cuerpo (no penséis en sicotrópicos, no los necesito, mi cerebro ya los produce solo). Aun así, creo que mi teoría tiene visos de ser real, o al menos verosímil. La historia comienza cuando un grupo de granadinos, con José Ignacio Lapido a la cabeza, forman un grupo post-punk a la sombra de la influencia de The Clash. Por aquella mitad de los 80 irrumpe con su primer disco, "Cementerio de automóviles", con ese post-punk ya comentado, oscuro y más pop que rock. Poco a poco fueron marcando una época en el rock nacional con canciones potentes y unas grandes letras (como la titulada "Qué fue del siglo XX"), aspecto que no era muy frecuente en el rock patrio del momento, salvo pequeñas excepciones. Poco a poco irán evolucionando hacia el rock más convencional hasta que en 1996 dan su "Último concierto".

Antes de desaparacer 091, Antonio Arias (bajista en algunos de los discos de esta banda) forma en 1991 Lagartija Nick (punk-pop melódico), grupo que tomó el testigo del antiguo número de la policía. Es especialmente con dos de sus discos cuando se encumbran en los reyes del rock alternativo hispano: "Inercia" y "Omega", este último junto al cantaor de flamenco Enrique Morente (un maestro en su estilo), donde cantan canciones de Leonard Cohen o poemas de Federico García Lorca; primordiales ambos para cualquier discoteca básica del rock. A partir de aquí, el grupo hace algún que otro disco reseñable, aunque los dos comentados son los básicos y cúlmenes de estos vecinos de la Alhambra.
A la vez que los Lagartija Nick están llegando a la élite y cima de nuestro rock alternativo patrio, una nueva formación empieza a despuntar en la tierra del reino nazarí, sacando un ep primerizo con la genial canción "Mi hermana pequeña", son los, para mí, actuales reyes de todo lo que huela a pop alternativo nacional. Y es que la mente inquieta de J ha dado para mucho. Cualquiera de sus discos podría ser nombrado aquí, pero el último ya ha sido una "pasada" de ingenio. "La leyenda del espacio" ya remite al famoso disco de Camarón "La leyenda del tiempo" donde este pretendía revolucionar parte del flamenco (cosa que consiguió y no el triste del Pitingo ese), y es que J y sus compañeros hacen lo propio, haciendo canciones de su estilo pop de toda la vida, pero cada una con un compás diferente según el palo del flamenco que hayan elegido. Y además ambos estilos confluyen sin problemas. Hay desde alegría, taranta, soleá, bulería, etc.
Y por último, a Lori Meyers se les ocurre sacar un disco como "Cronolánea", con el que ya rematan las buenas sensaciones de los anteriores "Viaje de estudios" u "Hotel Pimodán". Todo un disco altamente recomendable para cualquier discoteca que se precie, que además llevan genialmente al directo. Y seguro que vendrán más bandas granadinas...
Si Boabdil no fue capaz de defender la ciudad ante los católicos reyes, estos herederos de la sombra de la Torre de la Vela sí que defienden el nivel musical de la preciosa ciudad del oriente andaluz.